En ocasiones, los logotipos confusos no sabemos si están diseñados así a conciencia o son un descuido del «profesional» de turno. Queremos pensar que son un despiste…
Porque sería tener muy mala milk si de verdad alguien es capaz de crear a sabiendas logos como los que te vamos a mostrar.
Los logotipos confusos no entienden de sectores
Y es que se pueden colar en ONG’s, empresas de telecomunicaciones, institutos, etcétera. Te vamos a mostrar unos cuantos ejemplos de logotipos confusos que harán que te lleves las manos a la cabeza.
Empezamos con El Instituto de Artes Orientales. En qué estaría pensando el diseñador gráfico italiano Emanuele Abrate en el momento en que diseñó este logo sigue siendo un misterio a fecha de hoy. Con una excusa de este tipo:
Quise mantener el concepto, trabajar en el espacio negativo e inverso de las formas y mejorar la figura de la pagoda.
Nos obsequió con el logo (de la izquierda, claramente). Por suerte, otras manos más experimentadas ya han resuelto este problema (imagen de después).
En la Clínica Dental San Marcelino no tuvieron cuidado a la hora de superponer imágenes, y aunque este es uno de los logotipos confusos más divertidos, de coña nada.
A no ser que la idea de ir a este dentista es que salgas con una sonrisa de un modo u otro.
No tenemos dudas de que en la cocina de Mamá Baking se cocina con pasión. Más que con pasión, con verdadero fuego. Estaréis con nosotros en que la revisión del logo está mucho más conseguida.
Otro flagrante ejemplo de logo erróneo, políticamente incorrecto, soez y con un ¿doble sentido? inadmisible, el de Arlington Pediatric Center. Muy enfrascado tenía que estar quien diseñó semejante atrocidad para no darse cuenta de lo que estaba dibujando…
Y mucho ojito con la revisión del mismo: un vistazo rápido te parece correcto, pero si te quedas mirando la imagen durante 5 segundos, ejem, ejem.
El último ejemplo que os traemos es un clásico: Kostelecke Uzeniny Sausages, una empresa cárnica checa que mantuvo el mismo logotipo durante 100 años (véase el de la izquierda). Alguien con buen ojo sugirió cambiarlo y adaptarlo a los tiempos que corren eliminado todo tipo de orientación sexual.
El brief de 1917 decía lo siguiente: queremos un logo que represente a un señor de entre 40 y 50 años, elegante y al que le gusten las salchichas. Dicho y hecho.
Ya has visto que lo que menos te interesa es que tu logotipo (y tu empresa) sea recordada por tener una imagen poco apropiada.
La mejor manera es llamarnos a nosotros para que te ayudemos con nuestros geniales logotipos. ¡Estamos deseando ayudarte!