Muy pocas, o ninguna, empresas del sector sanitario han cuidado hasta ahora el diseño farmacéutico para aplicarlo al packaging. Siempre se ha ligado la presentación de estos productos como algo «feo», tosco, y sin estilo alguno.
Hasta ahora, que la creatividad da rienda suelta a las clásicas tabletas de aspirinas, y todo de la mano de Betr.
Un diseño farmacéutico con estilo Flat
Muchas personas no ven el lado vistoso y creativo de un producto. Y no cuidan los detalles. ¿Vacunas sin diseño? ¿Cajas de pastillas impersonales? No, no por tener un diseño farmacéutico el medicamento tiene menos propiedades, funciona peor o es de menos calidad.
La imagen moderna y funcional que Betr ha imprimido en su packaging hace precisamente el efecto contrario.
Empleando lo que se conoce como flat design, esta empresa del sector de la salud asocia cada producto con un color (en tono pastel) y potencia la imagen del producto.
Siguiendo la siguiente clasificación de color para las medicinas: color verde para síntomas de alergia, dolor utilizando el amarillo y morado para el sueño, basta un simple vistazo para saber qué necesitamos tomar y comprar. Igualmente, y como no podía ser de otra forma, se incluye toda la información importante.
La tipografía que se ha elegido es muy clara y cómoda, lo que resulta perfecto para añadirle familiaridad y credibilidad a la marca. Betr (Better, que es como se pronuncia la marca) ha conseguido un diseño farmacéutico digno de mención.